LOS PUNTOS SOBRE LAS IES…

                     Fracturas en el PAN…

                                            -José Angel Sánchez López-

Todos los hombres cometen errores,

pero sólo los grandes aprenden de sus errores

                  Winston Churchill

La semana pasada escribimos en este espacio sobre la pérdida de los ideales que le dieron vida al Partido Acción Nacional.

Creo que nos quedamos cortos, porque en los últimos días este sentimiento ha venido creciendo en los militantes de ese partido que llegaron a él por convicción, creyendo en sus principios y sus ideales.

Y no me refiero solo a los viejos militantes, a los que en muchas ocasiones me he referido como los panistas tradicionales, puros, que lucharon contra viento y marea, en medio de mil vicisitudes para que el ideal democrático cobrara forma y se arraigara en nuestro país.

Me refiero también a los que se han sumado al paso del tiempo, pero siempre con la convicción de luchar por construir el bien común a través del ejercicio democrático.

Todos ellos llegan hasta la indignación al ver la forma como quienes detentan el mando en las cúpulas del PAN, tanto las nacionales como las estatales en muchos casos, lo utilizan para acomodar a sus cuates, cumplir con compromisos por favores recibidos o intereses personales o de grupo, pero muy alejados de la ideología partidista.

En el pasado reciente, varios panistas han renunciado a la militancia molestos algunos, asqueados otros al darse cuenta de como el partido, su partido, ha sido utilizado y está siendo utilizado para el bien propio mas no el común, no el de México.

Hemos visto como un Joaquín Montaño renuncia al partido por el que llegó a ser Senador, molesto por el juego sucio que se hacía en su contra para impedirle llegar a la candidatura a la alcaldía.

Como hemos visto también la expulsión de aquellos militantes que se atreven a hacer uso de su constitucional derecho a la libertad de expresión para señalar vicios y corruptelas al interior del partido.

Y mas recientemente otras renuncias de militantes como don Rogelio Sada que tira por la borda mas de 50 años de militancia y activismo panista, indignado por la nominación de indeseables como el ex alcalde Fernando Larrazábal, causa por la que también renunció Alejandro Páez que tenía 30 años en el PAN.

Indignación también ha causado la forma en que Gustavo Madero y Felipe Calderón de hecho se burlaron de don Jorge del Rincón, uno de los íconos del panismo en Sinaloa, al mandarlo a la casilla 26 de la lista plurinominal para el Senado. Nomás de relleno.

Respecto a este caso, nos escribe Guillermo Padilla Montiel: “Realmente es lamentable y reprochable la tomadura de pelo que le dio el CEN del PAN a don Jorge del Rincón al pedirle todos sus datos dizque para darle la senaduría pluri por su trayectoria. Don Jorge no la había pedido, sino que el CEN se lo ofreció como un reconocimiento pero parece ser que el ofrecimiento no fue sancionado por Calderón, ese que hace 6 años le exigió a Fox sacara las manos del proceso y que hoy se le olvidó”

Pero veamos lo que, refiriéndose a las reacciones de inconformidad, escribe Esteban Zamora Camacho en su artículo En el PAN: el despertar de los dejantes: “Por todo el país se advierte una exigencia de “volver a ser lo que somos”, como se dice al interior del PAN. Exponentes destacados de ese movimiento son don Luis H. Álvarez y Ernesto Ruffo pero no son los únicos, el movimiento se extiende en círculos concéntricos y muchos de los panistas que no se habían manifestado por indolencia, por tibieza e indiferencia o quizá atemorizados por el espantajo de una sanción por ventilar públicamente los asuntos internos más desagradables del partido, que ya no son internos sino públicos, se han decidido a dejar de ser dejantes”.

Mas adelante Zamora Camacho señala: “El suceso más escandaloso, que no es un caso aislado y que ha provocado esta reacción de “levantada intransigencia”, como decía Gómez Morín, es la selección como candidatos

de Acción Nacional de Fernando Larrazabal y a otros individuos de su misma ralea”.

Concluye Esteban, luego de importantes reflexiones sobre lo que sucede en el PAN: “Habrá que ver si la dirigencia panista admite que la sigan escarneciendo la soberbia y la insolencia de los que ya se acostumbraron a pasar a caballo sobre las más elementales reglas de la legalidad, la moral y la decencia. Enmendar esas barbaridades le devolvería credibilidad a Acción Nacional”.

Y esto es apenas la punta del iceberg de los conflictos que están corroyendo a ese partido, ya que las inconformidades se extienden por todo el país.

Hay problemas en más de 20 Estados, entre ellos Sinaloa.

Pero la docilidad tiene preso a Gustavo Madero y la soberbia de Felipe Calderón están llevando a su partido hacia el despeñadero.

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Marzo 8/2012