Bien pero…
- José Angel Sánchez López -Si discute usted, y pelea y contradice, puede lograr a veces un triunfo; pero
será un triunfo vacío, porque jamás obtendrá la buena voluntad del contrincante.
Dale Carnegie
Buen acto presidió Enrique Peña Nieto en su primera visita a Sinaloa en su calidad de candidato a la Presidencia de la República. Ni Los Mochis, ni Mazatlán, fue en Guasave donde los mandos priistas decidieron se llevara a efecto la concentración de priistas escuchar el mensaje y los compromisos que dio a conocer el abanderado del PRI-PVEM.
Es obvio no faltan las críticas y hasta descalificaciones de militantes o simpatizantes de otros partidos que ven ya prácticamente hundidos en la desesperación como las campañas anti peñistas y anti priistas no le han afectado al mexiquense en su posición como puntero en todas las encuestas de opinión que se han venido manejando.
Es cierto, y hay que decirlo. Hubo algunos problemas o fallas de logística que dieron pauta para algunas críticas.
La peor de ellas fue la hora del evento.
En pleno mes de mayo, bajo un sol canicular, los asistentes al evento tuvieron que permanecer varias horas, ya que empezaron a llegar desde las 9 de la mañana y el evento estaba programado para las 11.
El candidato arribó a las 11.30, lo que, visto desde la óptica de la agenda es correcto. Lo malo es que no se tomó en cuenta por los organizadores locales las inclemencias de un sol que no sabe de políticas ni logísticas.
Pero la gente aguantó porque quería ver de cerca al candidato, saludarlo.
Mas todavía cuando fuera de todo protocolo, Peña Nieto entró por lo alto de las gradas centrales del “Carranza Limón”, bajó saludando de mano, abrazos, palmadas y alguno que otro beso de mujeres, jovencitas y niñas que lo buscaban a su paso. Recorrió enseguida orilla de las tribunas desde el terreno de juego y en ocasiones saltaba a las gradas para estrechar mas manos.
Luego se metió entre la muchedumbre que llenada el campo y siguió con los saludos.
Esto le llevó 30 minutos, media hora en la que los miles de asistentes no disminuían el entusiasmo bailando y lanzando porras.
Aquello fue una verdadera fiesta.
El detalle, cuando Peña Nieto hablaba parte de la gente comenzó a sentirse agobiada por el sol y a abandonar el estadio, dejando huecos y vacías algunas gradas hacia el jardín izquierdo.
Esto hubo quien lo interpretó como algo igual a lo que le sucedió a Josefina Vázquez Mota en el arranque de su campaña, pero no, la cantidad que salió, en número y proporción fue mucho menor que aquella.
La mayoría continuó ahí escuchando el mensaje del candidato y aplaudiendo los cinco compromisos que anunciaba, algunos concretos para Sinaloa como la Presa Santa María y la elevación de los bordos del Canal Humaya, y otros de alcance nacional, como el programa de apoyo a productores agropecuarios que permita impulsar la tecnificación y mecanización permanente, el programa emergente de rescate y exploración de mantos acuíferos para mitigar los efectos de la sequía y un programa de mas recursos para la construcción de bordos para mantener y abastecer de más agua a la agricultura sinaloense. Compromisos que fueron firmados y protocolizados ante el Notario guasavense Ricardo Aguilasocho.
En lo general, fue un buen acto, que dejó grato sabor de boca en el candidato, sus acompañantes y los priistas y simpatizantes que asistieron, inclusive los que se salieron que todavía comentan con gusto la experiencia de ese sábado.
REMOLINOS. Presentes todos los candidatos postulados por el PRI para el Congreso de la Unión: Aarón Irízar López y Daniel Amador Gaxiola, de los mas aplaudidos iban de un lado a otro del templete antes de la llegada de Peña Nieto. Uno a uno fueron llegando los aspirantes a diputados. La primera en subir fue Vicky Vega Gastélum, luego llegaron los demás Blas Lara Rubio, Alfonso Inzunza, Alfredo Padilla,, Jesùs Valdés, Sergio Torres, Paquis Corrales e Irma Tirado… Por unos minutos hubo un solitario en el templete: Alfredo Padilla. Los demás candidatos se concentraron al frente para que les tomaran fotografías y él se quedó atrás, solo sin que nadie lo pelara, pero se desquitó en la foto de todos con el candidato, pues llegó al último y quedó al frente… Juntos llegaron al templete los ex Gobernadores Juan S. Millàn y Jesús Aguilar Padilla. Luego arribó Francisco Labastida Ochoa y se acomodaron juntos arriba. Faltaron los dos ex sobrevivientes: Antonio Toledo Corro y Alfredo Valdés Montoya, que por su estado de salud no pudieron asistir… Decía y afirmaba que no, pero siempre si. El Gobernador Mario López Valdez había asegurado, todavía la mañana de ese sábado que no iba a recibir a Peña Nieto, incluso había asegurado que, si se lo solicitaban lo recibiría en su despacho de palacio de gobierno. Se especuló que ordenó celebrar el programa “Gobierno en Movimiento” ese sábado en Mocorito para justificar el no acudir a saludar al candidato. ¡Pero nada de eso! Alrededor de las 12.30 Malova abandonó la gran carpa, abordó un helicóptero y se fue a Culiacán. Saludó y conversó en privado con Peña Nieto y se regresó a la tierra de mi madre para continuar con su evento. Peña Nieto, al término de su discurso, que duró solo 18 minutos, respondió brevemente a algunos preguntas de algunos reporteros que pudieron acercársele antes de que abandonara el estadio y se trasladó a la pista de Camagüey. Ahí se cambió de ropa (la que traía estaba bañada de sudor, tierra y maquillaje que le plantaron las alborotadas damitas que lo abrazaron (menos la atractiva Güerita de
Sinaloa que desde el templete de fotógrafos le mostraba una cartulina en la que rezaba: “Cásate conmigo” y tuvo que conformarse con verlo de lejecitos). Abordó un helicóptero acompañado por Heriberto Galindo, David López Gutiérrez y Eustaquio de Nicolás. Minutos antes habían partido en otro helicóptero rumbo a Culiacán Alfredo Villegas y Baltazar Hinojosa. En el hangar de gobierno del Estado fue el encuentro. Malova llegó acompañado por Francisco Frías Castro, ya antiguo conocido de Peña Nieto, Juan Ernesto Millán, Francisco Labastida Gómez de la Torre y Gustavo Zavala, hijo de nuestro desaparecido amigo Roberto Zavala Echavarría. Tras los saludos, Malova y Peña Nieto se introdujeron al privado y ahí charlaron, sin más testigos que los muebles, durante media hora… Por estos rumbos estuvo el fin de semana el paisano Enrique Jackson Ramírez. El sábado lo saludamos en el Santa Anita cuando acudía a un desayuno con Ejecutivos de Ventas y más tarde lo vimos moviéndose como pez en el agua en el templete del evento de Peña Nieto… Solo dos sinaloenses viajaron con el candidato en su viaje a Sinaloa: Heriberto Galindo y David López que, insisto, están en el circulo mas cercano al candidato presidencial. A Heriberto lo escucha y en David depositó el manejo de la información y atención a los medios de comunicación. Excelente trabajo de coordinación con medios realizaron Pascual Cervantes, Jorge Alán Urbina y en la talacha apoyando en todo a los reporteros esa excelente, trabajadora e inteligente mujer que es Ana María Alvarado. Gracias y felicidades!
Opiniones, comentarios o sugerencias a: sanlop24082000@yahoo.com. Esta columna la encuentra también en el blog: http://www.lospuntossobrelasiesdejasl.blogspot.com/ semanario Rio Elota y también en www.historianews.com/, http://latalacha.com.mx/, www.amanecersinaloa.com/, www.snn.com.mx/, http://www.criticapolitica.mx/7798, http://www.contraversion.com.mx/, www.losintocablesdejuacer.com/
Mayo 29/2012
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